Seguro que muchos ya conocéis la noticia, pero no por ello ha de dejar de comentarse. El hotel Renaissance Fira de Barcelona ha puesto su nombre en el mapa con una aparentemente simple iniciativa comercial: promover una campaña de mecenazgo con artistas musicales. Hoy recibe peticiones de grupos de todo el mundo y el impacto mediático ha sido enorme. Esta es la historia…
La piscina negra de la terraza del hotel, con vistas únicas de Barcelona |
Todo comenzó con una idea simpática para dar más vidilla a este
nuevo hotel barcelonés de imponente arquitectura e instalaciones de lujo (no en vano ha
sido diseñado por Ateliers Jean
Nouvel y el estudio Ribas & Ribas). Una iniciativa cultural para promover la
actividad musical de grupos y solistas que estén promocionando su trabajo en
Barcelona.
La cosa es así: el grupo se aloja gratis en este hotelazo, y, a
cambio, ofrece un concierto a huéspedes y público en general en la imponente
terraza-mirador El Cel, a más de 100 metros de altura y que ofrece uno de los
mejores "skylines" de la ciudad.
El nuevo álbum de Mäbu |
El primer grupo
que se ha beneficiado de esta actividad de mecenazgo es Mäbu, grupo indie con
influencias folk que está promocionando su segundo álbum, “Detrás de las
luces”. El pasado 6 de junio ofrecía su concierto nocturno en acústico en la
terraza del hotel. Como chascarrillo, comentaros que María Blanco, la cantante,
es hija de los mismísimos Sergio y Estíbaliz.
La idea se podía
hacer quedado en varios conciertos y un hasta luego, pero el hotel optó por
darla a conocer, iniciando una campaña en prensa, llamando a diferentes medios…
tras los primeros reportajes televisivos, el efecto bola de nieve fue rápido,
rapidísimo, con la inestimable ayuda de las redes sociales. A fin de cuentas,
¿a qué grupo no le interesa alojarse “by the face” en un hotel de vanguardia,
encima en Barcelona, y de paso dar un concierto?
La avalancha de
peticiones ha sido tal, incluso de fuera de España que ha desbordado todas las
previsiones del hotel. “Nos han llamado grupos hasta de Santiago de Chile”, me
cuenta Patricia Lledó, la responsable de Prensa. Y ellos, encantados con la
demanda… y la repercusión mediática. “La idea es poder poner nuestra terraza a
disposición de estas formaciones musicales durante los meses de verano”.
Lógicamente, el hotel seleccionará entre todas las peticiones recibidas las más
afines a la filosofía de su marca y al perfil de sus clientes.
De este modo, sin
invertir un euro, el establecimiento barcelonés, situado muy cerca del recinto
ferial Gran Vía 2, en L’Hospitalet de Llobregat, ha logrado una gran notoriedad
en los medios, se ha dado a conocer más allá de nuestras fronteras, ha hecho
“ruido” en la Red, se da a conocer entre un público joven (¡importante!!) y su
nombre se ve asociado a conceptos tan positivos hoy en día como “mecenazgo” y
“apoyo a la cultura”.
También incorpora y se beneficia de una oferta musical en vivo y de paso da a
conocer su espectacular terraza, algo muy importante ya que el hotel no se
encuentra en el centro de la ciudad.
Y ahora muchos
hoteleros me dirán lo que me comentan muchas veces: “¡pero si eso ya lo he
hecho yo!” o “nosotros ya hacemos desde hace años algo muy parecido”. Vale, sí,
de acuerdo, pero NO lo comunicáis. O no lo habéis comunicado bien. Y hoy en día
ya se puede tener la mejor idea del mundo, pero si no se difunde no hay nada
que hacer.
Pero ojo:
comunicar no es hacer y enviar una simple nota de prensa. Es un trabajo en sí
mismo que requiere currárselo, sugerir, proponer, realizar seguimiento,
trabajarse las redes sociales, facilitar la cosas a los medios, dárselo
mascadito, ponérselo casi en bandeja. Una labor de siembra que al final va
dando sus frutos. Y que pocas veces es inmediata.
Así que, amigos
hoteleros, explicad y compartid las buenas ideas que tenéis, las iniciativas
que realizáis día a día. Por simples que parezcan. Muchas son geniales y pueden (tienen
que) darse a conocer. Y con ellas, vuestro hotel.
El hotel es un jardín vertical de plantas tropicales... |
PD. ¡Ah! realicé
el año pasado un reportaje sobre el Renaissance Fira en la revista
Horeco, justo cuando acababa de abrir sus puertas, y me impactó su filosofía de
hotel sostenible. Jean Nouvel lo ha concebido como un jardín vertical: una de
sus fachadas alberga, a lo largo de sus 27 pisos, hasta 293 palmeras. Está formado por dos imponentes torres de 110
metros de altura unidas sólo por dos elementos: un restaurante panorámico
rodeado de vegetación, y la terraza mirador en la azotea, justo donde se dan los conciertos.
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